sábado, 24 de enero de 2015

EL MITO DE CUNIRAYA HUIRACOCHA y EL INCA HUAYNA CÁPAC

El mito cuenta que Cuniraya Huiracocha existió desde tiempos muy antiguos y que los demás dioses como Pariacaca lo estimaban más que a cualquiera, y posiblemente que fuera su padre, poco antes de la aparición de los españoles. Cuniraya se dirigió al Cusco y habló con el Inga Huayna Cápac diciéndole: «vamos, hijo, a Titícaca», le dijo, (”allí voy a iniciarte en mi culto”) (TAYLOR, 1999: 197); le indicó al inca que enviara a sus sabios o brujos a las tierras de abajo, es decir, a la costa, al santuario del padre de Cuniraya (¿Pachacamac?) para que le pidieran  una de sus hermanas y volvieran en cinco días. Una vez en el lugar, el padre de Cuniraya le entregó en una taquilla para que el mismo inca lo abriera, pero fue más la curiosidad del chamán que animado por la golondrina que la abrió: “En el interior apareció una señora muy elegante y muy hermosa/ Su cabello era como oro crespo; estaba vestida con ropa finísima y su tamaño era minúsculo. / En el instante mismo que la vio, la señora desapareció”. (TAYLOR, 1999: 201).
A pesar de no haber cumplido con su misión, el hombre encargado fue perdonado por Huayna Cápac por haber sido animado por las golondrinas, entonces nuevamente regresó y cumplió ahora sí con el encargo y «Cuniraya y el Inga lo recibieron con gran regocijo». Antes de abrir el encargo, Cuniraya trazó una línea en el suelo indicando que en un lado se quedaría Cuniraya; por el otro,  entraría Huayna Cápac y su hermana y en adelante no se volverían a ver nunca más. Y cuando abrió el cofre el lugar se inundó de luz. Y el inca dijo que se quedaría en el mismo lugar (¿el Titicaca?) con su coya, e indicó a un hombre de su ayllu para que se dirigiera al Cusco y que diga que él es Huayna Cápac y luego desapareció. Y cuando murió Huayna Cápac, «unos y atros, al proclamar la prioridad de sus derechos, provocaron el derrumbe de su señorío. / Así estaban las cosas cuando los huiracochas aparecieron en Cajamarca» (TAYLOR, 1999: 205).
Este mito muestra que Cuniraya estableció un parentesco de cuñado con Huayna Cápac, por lo que representa una alianza o justificación mítica de la integración, entre los habitantes de la costa y los habitantes de la zona altoandina. Asimismo, interpreta la rivalidad de los hijos de Huayna Cápac, Huáscar y Atahuallpa, y la situación existente a la llegada de los españoles y la causa de la caída del Tahuantínsuyo.


Tomado de: Los mitos y las tradiciones de Huarochirí durante el siglo XVII. 
Articulo realizado por Eduardo Vásquez Monge.

* TAYl.OR,Gerald (1999). Ritos y tradiciones de Huarochiri. Manuscriso quechua de comienzos
del siglo XVII. Segunda edición revisada. Lima: IFEA, BCRP y UniversidadRicardo
Palma

No hay comentarios:

Publicar un comentario